Para la gran mayoría la designación de este nuevo gabinete ha significado una decepción, un endurecimiento de la postura cerrada del gobierno a todo intento de crítica al modelo económico planteado. Algunos analistas han considerado que es un gabinete de "mecha corta" suponiendo la escasa permanencia que pueda tener en el alborotado escenario político peruano. Otros, han avecinado la espera de "tiempos duros y turbios".
Sin embargo, y tomando en cuenta las opiniones lanzadas por el nuevo Premier esta mañana y las de algunas figuras políticas el día Sábado, quiero permitirme ciertas dudas. Velásquez ha dicho que no impondrá una agenda, sino que será un coordinador de la política general del gobierno. Unido a ello, es importante tomar en cuenta las opiniones de los fujimoristas al saberse la designación de Velásquez al que han calificado "como uno de los mejores operadores políticos del gobierno de García". Es también para tomar en cuenta la opinión de algunos medios fujimoristas.
Considero que, si bien es cierto Velásquez Quesquén no asumirá un rol de independencia frente a al accionar de Alan García, su rol tampoco se reducirá al de un simple "secretario". Creo que ha sido colocado en ese puesto como una manera de consolidar las relaciones existentes con los grupos de "oposición" que estuvieron algo ariscos con Yehude Simon (Fujimoristas, Unidad Nacional) con miras a sacar adelante las iniciativas programáticas aún pendientes (TLC con China, Chile, etc.) y de comunicar al grupo empresarial que se ha quedado "sensible" con los últimos desaciertos del gobierno el mensaje de que "Aún estamos contigo y necesitamos de tu apoyo"
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